Refranes – Letra P

Padre millonario y trabajador, hijo vago y malgastador.

Pan con pan, comida de tontos.

Pan para hoy, y hambre para mañana.

Para dejar el pellejo, lo mismo es hoy que mañana.

Para el guayabo, helado.

Para ese viaje no se necesitan alforjas.

Para muestra, un botón.

Para que la cuña apriete, ha de ser del mismo palo.

Para todo mal, mezcal, para todo bien, también.

Para uno que madruga, hay otro que no se duerme.

Pelillos a la mar.

Perro ladrador, poco mordedor.

Perro que es huevero, aunque le quemen el hocico.

Pesar ajeno, no quita el sueño.

Piedra que rueda, no cría moho.

Piensa el ladrón que todos son de su condición.

Piensa mal y acertarás.

Pleitos tengas y los ganes.

Poco a poco se anda lejos.

Pocos y mal avenidos.

Poderoso caballero es don dinero.

Por dinero baila el perro.

Por el canto se conoce el pájaro.

Por el hilo se saca el ovillo.

Por el humo se sabe dónde está el fuego.

Por el interés, te quiero Andrés.

Por la boca muere el pez.

Por la caridad entra la peste.

Por San Blas la cigüeña verás.

Por sus frutos los conoceréis.

Por un clavo se pierde una herradura.

Por un oído me entra y por otro me sale.

Por un perro que maté, mataperros me llamaron.

Preguntando se va a Roma.

Primero es la obligación que la devoción.

Pueblo chiquito, infierno grande.

Puedes esconder la mano que roba, pero no la mano que gasta.